viernes, 10 de diciembre de 2010

Un aplauso para Julian Assange

Por Florencia García Martelli
El pasado 28 de noviermbre se produjo un escandalo del que todo el mundo habla: el portal de internet, WikiLeaks, colgó en su página web 251,287 cables del Departamento de Estado de Estados Unidos. Pero no sólo se analiza la información sino la forma de filtrar los datos. Si bien, Julian Assange, fundador de WikiLeaks, es periodista, tal vez no todos piensen que “periodista” sea la palabra que más lo defina. Lo que hay que resaltar es que el problema no fue el contenido de la información, ya que “es importante revelar la realidad política o diplomática del planeta”, como opina el periodista de Le Monde, Remy Ourdan.
Cada habitante de este mundo, debería tener el derecho de saber como actúan los políticos y funcionarios que los representan, pero aparentemente la única forma de enterarse de eso es mediante la filtración de información en un sitio web.
En tiempos donde el internet y las redes sociales ocupan un lugar fundamental en la vida de una gran cantidad de personas, y que con simples pasos uno logra acceder a la vida privada de otro, no debería existir una barrera para saber los pasos que dan los representantes de cada país para negociar.
Periodísticamente, no fue errónea la actitud del joven australiano  Assange en publicar el contenido de esos documentos, lo que no resulta meramente ético es difundir cables que eran totalmente confidenciales y que el joven no tenía ningún tipo de autorización en colgarlos en un sitio web.
Más allá de las distintas opiniones, Julian Assange, es una de las personas más polémicas en la actualidad, y si hay algo que hay que aplaudirle a este joven ambicioso es la investigación periodistica que realizó, ya que permitió que más de una persona se enterara de quiénes son en realidad y cómo se manejan esos  políticos que mantienen “dos caras” frente a la sociedad de sus países. Nada mejor que la transparencia absoluta. 

jueves, 9 de diciembre de 2010

Un infierno en llamas

Mi corazón latió como pocas veces lo hizo durante 135 minutos aproximadamente. Y en el último minuto el palpitar iba aumentando de una forma veloz, muy veloz. Comencé a respirar hondo y a la vez las lágrimas comenzaron a caer de mis ojos, pero simultáneamente sonreí, sonreí muchísimo. El sentimiento de la alegría misma es una de los mejores placeres de la vida, sobre todo cuando se disfruta. Y lo que yo sentí en esta final de la Copa Nissan Sudamericana 2010 fue exactamente eso. Una felicidad que desbordaba, que se impuso en mi persona a través de muchas lagrimas, pero todas y cada una de ellas fueron por la satisfacción enorme que me dio volver a ver a mi equipo levantar una copa internacional.  Hace mucho que no pasaba esto, y yo con mis 19 años puedo decir que prácticamente no había vivido nada parecido (era muy pequeña en 1995).
Independiente me hace sentir algo que nada ni nadie logra igualar. No es mejor ni peor que otros sentimientos, es simplemente hermoso. Ver al equipo del cual soy hincha y fanática pisar un terreno de juego me despierta un júbilo inmenso en el corazón. Pero no puedo negar que también me produjo y hasta me sigue produciendo miedos, sufrimientos y tristezas, sobre todo al ver a los jugadores retirarse de una chancha luego de la derrota.
Todo eso produce el dueño de Avellaneda, un sentimiento inigualable donde todos los estados de animos pasan por un mismo lugar.
Hoy independiente suma una copa internacional más a su larga lista, lista que no se actualizaba hace 15 años, casi una eternidad para quienes esperábamos con ansias este momento. Pero si algo puedo afirmar, desde mi lado más humilde, es que el verdadero Rey de Copas es Independiente, y no por cuantas haya en la vitrina, sino por lo que significa ese término, ese apodo. Según la Real Academía, la palabra “rey” se define como :
1.       Monarca o soberano de un reino: Nuestro reino es Avellaneda. Avellaneda está teñida de rojo por donde se lo mire. “Para que sepas que en el barrio mando yo”.
2.       Hombre,animal o cosa del género masculino que sobresale entre los demás de su clase o especie por sus cualidades superiores: Por la lucha, la paciencia y la grandeza que tiene este club del cual estoy orgullosa de formar parte.
Papeles, bengalas, humo, fuegos artificiales y banderas tiñeron de rojo cada una de las ubicaciones que forman el Libertadores. Cada uno de esos lugares, tanto quienes estuvieron sentados como parados, son ocupados por personas que sienten el amor a la camiseta. Un amor que no se compara, no se imita ni se iguala. Un amor que sólo los hinchas del corazón del club podemos disfrutar.
 Al ver el Libertadores de América repleto de fanáticos enfermizos del “rojo” no hizo más que aumentar mi orgullo, causó un pensamiento similar a “Gracias papá “. Si, gracias por haberme introducido en esta felicidad que sólo logran producirla en mi vida esas personas que dejan alma y vida en un piso de césped.
Tal vez mucho no compartan este pensamiento,  pero si de algo estoy segura y creo que cualquier simpatizante de otro club de fútbol también puede afirmar, es que con este mérito Independiente se vuelve a incorporar lentamente en un lugar del que nunca debió salir, de aquel lugar al que el Rey pertenece. En una escala de grandes clubes donde cada vez son más, pero a la vez, cada vez son menos. Un hermoso final donde el fuego y el diablo tomaron el protagonismo.
El infierno está encantador.



jueves, 2 de diciembre de 2010

Cristina sabe jugar a la política

Respuesta al "periodista" Luis Majul: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1323234


El tema del momento son las candidaturas para los comicios presidenciales del 2011, pero sobre todo un caso en particular donde nada está definido: Cristina Fernandez de Kirchner.
El periodista Luis Majul publicó una nota en el diario La Nación hace 15 días en la cual se encargó de cuestionar la capacidad de la actual Presidenta para seguir en el poder de cara a las elecciones 2011. Un artículo en el que él escritor se basa solamente en su propia especulación y habla en nombre de “otras personas” de las cuales no se sabe ni su nombre ni su apellido, se maneja sin citar ninguna fuente confiable.
Sin embargo, el periodista se equivoca en ciertos puntos, y una de las tantas cosas a resaltar de ese artículo, son los porcentajes. Según el señor Majul, la imagen de Cristina creció notablemente luego de la lamentable muerte de su esposo y ex presidente,  Néstor Kirchner. Eso no se puede negar, ya que afectó notablemente a gran parte del pueblo argentino, y motivó a que muchas personas se acercaran más a la Presidenta para brindarle su apoyo. Pero, este periodista no chequeó las cifras de las encuestas realizadas antes de la muerte del ex presidente del Partido Justicialista.
En la encuesta que realizó Julió Aurelio Aresco, en Septiembre, el resultado para Cristina fue: la intención de voto de 34 por ciento y la proyectada del 41.2. Otro de los sondeos  más próximos a la muerte de Nestor fue el de la consultora “Ricardo Rouvier & Asociados”, el 24 de octubre, que dio como ganadora a la Presidenta con un 37,2 por ciento.
Si bien la imagen de la mandataria creció notablemente, vale resaltar que venía liderando los resultados de las encuestas sobre las elecciones 2011 antes de la desaparición física de su marido, hecho angustioso, que no hizo más que incrementar algo que ya estaba definido.
Cristina demostró que sabe jugar a la política. Gracias a las medidas del actual gobierno,  como por ejemplo la Asignación Universal por hijo, que redujo la indigencia entre en 55 y 70 por ciento, como la importancia que se le da a las personas mayores con la última iniciativa de la Presidenta de brindar un pago extra de 500 pesos al 83 por ciento de los jubilados debido a las fiestas, la argentina se convirtió en un país al que hay que tenerle respeto. No es un país perfecto, y está muy lejos de serlo, pero si está encaminado.
Si hay algo que Cristina Fernandez de Kirchner tiene es la actitud para encarar los comicios del 2011. Sin embargo, todavía no está dicho ni el sí ni el no por parte de ella. Habrá que esperar para ver quién será el o la candidata  por parte del Partido Justicialista.
El conocido Luis Majul trata de poner a la Presidenta en el papel de una mujer indefensa manejada por el Peronismo, pero ella es la que sabe manejarlo más bien y ya lo demostró.
Cabe destacar, que la multitud que se hizo presente en Plaza de Mayo el pasado 27 de octubre, no sólo despidió a un líder político como lo fue Nestor Kirchner, sino que también, fue a darle el apoyo a la Presidenta para que continúe siendo la cara visible de los argentinos ante el mundo. Una multitud que dejó en claro el tipo de modelo político que quiere para su país. 

El duro camino de las bandas tributo


La característica principal de Los Beatles fue su alegría. Y aun hoy, luego de 40 años de su separación, se mantienen presente en más de una generación, donde los abuelos, y tanto los padres como sus hijos disfrutan de la misma pasión. El cuarteto británico de flequillo, marcó un antes y un después en la historia de la música. Siempre tan humanos, rebeldes y alegres, lograron revolucionar y cambiar el sistema musical de esa época, y  no se puede negar que hoy en día sus canciones se encargan de seguir haciéndolo.
Hoy en día, los grupos tributos son los que se encargan de mantener vivo el recuerdo. Sin embargo, estos conjuntos disparan dos tipos de críticas, por un lado el aprecio de los fanáticos y por el otro el rechazo por no imitar como se “debe” a sus ídolos. Pero existe una realidad irrefutable: cada vez hay más bandas de este tipo y definitivamente llegaron para quedarse.
Euforia. Así se vive en tiempos de Paul Mccartney en Argentina, y el fanatismo del sector beatle no se detiene, sino que se expande. Ahora, más que nunca, las bandas homenaje a The Beatles arrasan con espectáculos y una popularidad en aumento. Si bien los grupos tributos no son novedad, entre la visita de uno de los íconos vivos del rock y la vigilia por la décima semana Beatle Latinoamericana, su trabajo está cada vez más vivo.
En 1982 nació la primer banda Beatle premiada internacionalmente: Danger Four, oriundos de Uruguay, con el objetivo de transmitirle a la juventud lo que se sentía escuchar en vivo a los legendarios ingleses. Coco Boudakian, líder y fundador del grupo, afirma que fue su propio fanatismo el que lo llevó a emprender una banda tributo que “inyecte a los más jóvenes la pasión que nosotros teníamos por la banda más maravillosa del rock”.
Músicos de todo el mundo, tanto jóvenes como adultos, se visten de sus ídolos y logran mantener viva la esencia de la música beatle. “Es un trabajo. La gente en realidad va a escuchar la música de los Beatles, y eso lo tenemos que respetar”, sostiene Bernardo Criscuolo, intérprete de Paul McCartney en The Shouts, una de las bandas beatle más importantes de la Argentina que se presentó en un show sorpresa el nueve de noviembre sobre una terraza en pleno microcentro porteño.
¿Qué tienen Los Beatles para que haya tantas bandas rindiéndoles homenajes? La respuesta resulta prácticamente obvia: su música, su carisma y las innovaciones que aportaron al terreno musical fueron únicas. Lo fantástico, además, es que su obra es atemporal y atrae a un público completamente variado, tanto en estilos como en edades. Este ingrediente, originario de los verdaderos fundadores de la banda, fue bien utilizado por todos los aficionados en brindarles honor. “Poseen el mejor repertorio del mundo para tocar. Tienen buenos temas, buenos arreglos, buenas melodías, buenas interpretaciones. Desde que los descubrí quedé atrapado por su magia”, asegura Fernando Blanco, integrante de Nube 9, banda tributo Beatle nacional cuyo reconocimiento viene en ascenso. Este grupo, también se caracteriza por alejarse de la imitación física o de disfraces, poniendo énfasis en lo meramente musical incorporando sus propios arreglos.
Luego de las dos fechas de Paul en la Argentina, al igual que en 1993, surgió un efecto post-McCartney que revivió el frenesí fanático y se volvió a escuchar el grito beatlemaníaco. Oportunamente, el 25 de noviembre empieza la nueva edición de la “Semana Beatle latinoamericana”, un evento que reúne en The Cavern-Buenos Aires a las mejores bandas Beatle, por lo que el estímulo de los fanáticos no se apagará.
 Bernardo Criscuolo, con una emoción que le resulta indescriptible tras ver en vivo a su principal influencia, reflexiona y asegura con una sonrisa en la cara: “El factor inimitable que tenía ellos era el carisma. Ninguna otra banda pudo jamás transmitirme la frescura como lo hacen los Beatles. Aún hoy, 40 años después de su disolución como banda, las fotos, los videos y documentos de los ellos muestran un carisma grupal e individual que nunca  antes se vio en otro conjunto.”

Entrevista a Cuarteto de Nos

Entrevista a Cuarteto de Nos

“Somos amargos pero tratamos de disimularlo”


La banda uruguaya volvió ayer a Buenos Aires y se presentó en Groove. La discoteca explotó con los miles de seguidores. Frente a un público prendido fuego, los músicos se mostraron insaciables de su ovación. Gran noche para el quinteto.


Los muchachos estaban contentos. Dado por finalizado el primer recital de sus dos fechas en Buenos Aires, el Cuarteto de Nos festejó con cerveza y empanadas, en un camarín que desbordaba de una alegría infantil, casi inocente, pero por demás abrumadora. Los largos años que lleva de trayectoria la banda uruguaya se pierden en el carácter simpático y aniñado que comparten todos sus integrantes, y se les notan las ganas de seguir haciéndolo: de jugar modestamente con su éxito. Se ríen, constantemente lo hacen, y eso los distingue; saben cómo seducir a la audiencia, y saben que llegaron después de 25 años de un camino musical difícil como el de la mayoría de los aficionados en el arte. Un fuerte aplauso para Roberto Musso, Santiago Tavella, Álvaro “Alvin” Pintos, Santiago Marrero y Gustavo “Topo”  Antuña.
-¿Qué les pareció el show?
Topo:  Caliente, muy caliente.
Roberto: Estuvo muy bueno. Fue la primera vez que vinimos después del Luna Park, que fue para la banda una fecha histórica. Hoy tuvo otra onda porque era un público más discotequero,  se notaba que muchos nos estaban viendo por primera vez.
Santiago Tavella: Yo creo que una parte súper importante de los shows es el público, y hoy  estaban on fire. El público argentino es así, yo sé que nosotros no somos tan conocidos en Argentina como en Uruguay,  pero la respuesta que tenemos del público de acá es muy gratificante. Muy linda. Esta fecha me encantó.
-¿Consideran un mito eso de que el público Argentino se prende más fuego que otros?
S. T: No, y todo el escándalo de Andrés Calamaro, que dijo que los uruguayos son unos amargos, ¡es cierto! (risas).Quizás en Uruguay el público es amargo pero lo tenemos domado hace mucho tiempo, con nosotros no son así.
¿El público uruguayo es realmente diferente?
R: Somos amargos pero tratamos de disimularlo (risas)
T: Creo que el argentino es mucho más futbolero y muy fanático, y el uruguayo es como más resentido, no digo que sea malo, sino como más vergonzosos.
 -Ustedes tienen una trayectoria musical de más de 25 años, ¿Por qué creen que en Argentina despegaron con “Raro”?
S. T: Yo creo que no es casualidad, porque fueron discos que se hicieron con un proceso de producción mucho más exhaustivo y más profesional .En cuanto al sonido y en la selección de canciones, estos últimos dos discos que hicimos son como de 12 canciones que salieron de cuarenta: algo bueno tiene que salir.
¿Cómo tomaron la ida de Riki Musso?
R: Riki es mi hermano, lo veo todos los días, fue una decisión de él en realidad. Con “Raro” empezamos a irnos de gira mucho tiempo, lejos de casa mucho rato y Riki tiene familia, dos chiquitas. Por esto no estaba muy copado con irse de gira, mientras que para nosotros la apuesta estaba en el exterior.
Santiago Marrero: Cuando entré a la banda como tecladista, me preguntaron: “¿Tenés novia? “, “no” .“¿Podés irte un mes de tu casa para tocar?”, “Sí”. “Vení a tocar”
¿Qué banda los llevó a la música?
S.T:  Tanto a los Musso como a mí nos llevo a la música los Beatles, lo primero que escuchamos que valió la pena.
¿Qué piensan de la música argentina? ¿Qué les gusta?
T: Por Sumo ardo, y Los redondos también. Lo bueno es de lo viejo. Veo que no pasa en Argentina lo que pasa en Uruguay;  o acá bajó el nivel, o allá subió.
R: Cuando estaba Sumo o Soda, parecía como algo inalcanzable. Ahora no sé.
Roberto, tus canciones se caracterizan por rimas ocurrentes y la elocuencia de las historias ¿Cómo es el proceso de escritura?
R: Es un laburo grande. Las canciones de “Bipolar” las escribí un año antes de  ponernos a grabar. Siempre digo que es un 5% de inspiración y un 95% de laburo. También tiene que tener una base musical, porque no cualquier música sostiene a cualquier letra.
¿Por qué piensan que los argentinos los consideran, prácticamente, una banda nacional?
T: Ése es un problema de los argentinos, no nuestro. Creen que Uruguay es una provincia argentina.
¿Se puede definir Cuarteto de Nos?
S.T: Trabajamos toda la vida en hacer algo que no se pueda definir así que…

viernes, 29 de octubre de 2010

Hasta siempre

Por Florencia García Martelli
Piel de gallina. Esa es la única sensación que sentí  ésta mañana en Plaza de Mayo. Una plaza colmada de sentimientos. Gente llorando y expresando la tristeza misma, otros aplaudiendo y cantando para darle el apoyo a una mujer fuerte, muy fuerte. Una mujer que se bancó mucho, y seguramente, este sea el momento más fuerte que le tocó bancarse.
Un  cielo cubierto. El color gris se presentaba arriba y abajo.  Comenzó a llover. Muchas lágrimas que caían del cielo en forma de lluvia y otras de los ojos de varias personas. Pero nadie se movía, todos quietos, todos en sus lugares. El mal tiempo no impidió que la multitud siguiera concentrada.
Banderas argentinas, flores, pañuelos y carteles cubrían todas las vallas que rodeaban la Casa Rosada. Había gente de todas las edades. A mi derecha había una nena de dos años, a caballito de su mamá, gritando: “Viva la presi Cris”, y a mi izquierda, una señora de unos 90 o 95 años, canosa, con muchas arrugas en su cara, pero con una fuerza indescriptible. La piel de gallina se apoderaba de mí al escuchar cada canto,  cada aplauso, al ver todos esos ojos cristalinos.
Hoy se despide a un ex presidente, a un grande por donde se lo mire. Se puede estar a favor o en contra de este hombre que dejó la tierra, pero no se puede negar que fue un líder. Un hombre que estaba lejos de ser perfecto políticamente, pero que murió luchando y prefirió preocuparse por otros antes que por él. La peleó.
La ciudad está en silencio. Del cielo cada vez cae más agua y, sin embargo,  la gente sigue presente, dándole calor y fuerza a una familia dolida.  Los pies contra el suelo,  se niegan a despedir a Néstor Kirchner. Pero no le digan adiós, sino hasta siempre.
Se mantiene encendido el fuego argentino, que quemó, ardió y logro encender el fuego de todos.
 Bueno viaje, pingüino.

sábado, 23 de octubre de 2010

Una banda que promete


La melodía de Salta la Banca
Por Florencia García Martelli
Con público de todas las edades, llenan cada lugar donde hacen sus shows. Con poca trayectoria pero con muchas ganas de triunfar salen a los escenarios a hacer lo que más aman: música.

“Acudí a tu auxilio de forma inmediata. ‘Hola que tal’, tu sonrisa y perdí por goleada”, comienza “¿Quién dice?“, un tema de una de las bandas con mayor ascenso en la actualidad: Salta la Banca. Con tan sólo 26 años, Santiago Aysine es cantautor y  líder de este grupo que reúne varios estilos musicales y que ha logrado ganarse el corazón de sus seguidores a través de sus canciones. Este joven músico, fanático de Silvio Rodríguez, Joaquín Sabina y Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, entre otros, cuenta un poco sobre la banda y su comienzo arriba de los escenarios.
¿Cómo empezó Salta la banca?
La banda surge hace prácticamente dos años, cuando en pos de hacer canciones que expresen sensaciones y sentimientos de todo tipo, me acerqué a Alberto “Beto” Grammático a pedirle que me diera una mano con las guitarras, así yo podía abocarme específicamente a la voz.
Pasó menos de un año y medio, para que se sumen al proyecto Marcelo Scola, en el saxo, y Santiago “Pili” Maggi, en los teclados. Ambos formaban parte de la banda donde estaba Beto.
Luego se incorporaron al grupo Cecilia Grammático, en la batería, y Gonzalo Sosa, en el bajo. Ceci, la hermana de Beto, se acercó a la banda en el 2009 cuando empezamos a grabar nuestro primer disco, para hacer percusiones. Cuando Salta la Banca decidió desarrollar algo más eléctrico, la convocamos para tocar la batería, y luego se acercó Gonza, a través de Ceci ya que ambos tienen un dúo instrumental-experimental.
Por último se sumaron Mauro Ostinellii, en saxos, y Mariano Anselmi en las guitarras. Pero debido a diferencias, Mariano se fue en Mayo y Marce en Julio.
¿Cómo surgió el nombre de la banda?
Había que ponerle un nombre a todo ese mejunje de manifestaciones, en los que se tuvieron como premisa la "S" de Santiago y la "B" de Beto, ya que era como nos presentábamos al público en los primeros meses. Luego de largas horas de ocurrencias descabelladas, apareció Salta la Banca.
¿Fue difícil pelearla hasta llegar a donde están parados hoy?
Todo el tiempo es difícil. Los obstáculos sufren transformaciones. Algunos desaparecen, otros se descubren o reaparecen. Es verdad que Salta la Banca está en boca de mucha gente, y en muy poco tiempo se consiguieron muchísimas cosas. Pero también es verdad que nosotros sometemos nuestras vidas a sus apremios. Sus necesidades. Se hacen muchísimas más cosas que las que se imaginan, que ya de por sí, no son para nada fáciles.
¿Cuál fue el primer lugar dónde tocaron y para cuantas personas?
Con Beto tocamos en Makena, Palermo, un martes. Asistieron 90 personas aproximadamente. Todo un suceso.
 ¿Qué opinan de la evolución que vivieron?
Por mi parte, me cuesta mucho asimilar todo lo que está sucediendo. Ser reconocido en la calle, en ciudades inusitadas en mi imaginario, en provincias que están muy lejos, ¡en otros países! Pero trato de no dormirme en los laureles.
¿Cuáles son sus influencias musicales?
Uf, en ese sentido es una banda ecléctica y heterodoxa. No existe siquiera un denominador común. Beto y Mauro son fanáticos de Pink Floyd, así como de los Redondos. Yo me sumo a este último encanto. Ceci y Gonza son de otro palo, más del metal. Pili, en cambio, es “el Pedrito Aznar” de la banda.
 Su primer CD se llama “Ya no somos dos domos ahora”. ¿A qué se debe ese nombre?
El nombre surge a partir de que en un tema del disco, "Tu entrega", se menciona esa frase. Y la verdad nos parecía aplicable al contexto, porque ya no éramos solamente Beto y yo, y además se había incrementado mucho el público.
 En sus shows cada tema es distinto al del recital anterior. ¿A qué se debe?
Tratamos de cambiar los rasgos de las canciones para poder sorprender. El efecto sorpresa es muchas veces lo que genera en la gente esa satisfacción de entender que arriba del escenario hay gente que no se entrega y que sigue laburando para poder justificar esa concurrencia.
 Salta la Banca suele tocar seguido. ¿Por qué decidieron frenar su actividad durante el mes de agosto?
Porque estamos elaborando el material del segundo disco. Hay mucho trabajo puertas para adentro. Una vez consolidada la aprobación general, se puede salir a exponer ese producto.
Así que esperemos que el CD esté listo para Marzo del 2011.
Además de la banda. ¿Se dedican a otra cosa?
Todos tenemos nuestro trabajo. Aunque llevemos la vida de músicos medianamente parados, la verdad es que cada uno labura nueve horas por día. Yo soy empleado, al igual que Beto. Ceci es diseñadora, Gonza es obrero telefónico, Mauro es docente y Pili estudia medicina y música.
 ¿Cuáles son sus proyectos a futuro?
En lo que concierna al grupo, me parece que es poder llegar a boca de muchos, sin tener que transigirnos de ninguna forma, en ningún sentido. Queremos dejar un mensaje, una impronta en la historia, que tenga que ver con algo certero y real.
Por mi parte, y la de todos los músicos, desarrollar nuestras habilidades para poder dar con ese milagro.
¿Qué les deja Salta la Banca?
La sensación de que muchas cosas se pueden cambiar, y mil recuerdos. No sabemos hasta dónde vamos a llegar. Lo que sí sabemos es lo que sucedió, y realmente es hermoso. Ya somos tipos afortunadísimos.

martes, 12 de octubre de 2010

Película: La Carretera (The Road)

Dirección: John Hillcoat.
Guión: Joe Penhall sobre la novela “La carretera” de Cormac McCarthy.
Reparto: Viggo Mortensen, Kodi Smit-McPhee, Robert Duvall, Guy Pearce, Charlize Theron, Garret Dillahunt, Molly Parker, Michael Kenneth Williams.
Fotografía: Javier Aguirresarobe.
Música: Nick Cave y Warren Elli.
Duración: 108 Minutos.


Un camino de película
Por Florencia García Martelli

Soledad, tristeza y angustia son los principales sentimientos que se viven al ver la película “La Carretera”, dirigida por Johan Hillcoat y basada en la novela de Cormac McCarthy. Un film donde la oscuridad y la frialdad predominan constantemente en la pantalla. Se trata de un mundo post-apocalíptico, donde un padre (Viggo Mortensen) y su hijo (Kodi Smit-McPhee) comienzan un largo viaje hacia el sur luchando por sobrevivir. Un camino lleno de peligros, donde los seres humanos tienen que optar por reahcer su vida como vagabundoso o  asumir el rol de caníbales.
La película plasma la relación de amor y sacrificio incondicional entre el padre y su hijo, donde se pueden apreciar las excelentes actuaciones de ambos. Luego de ver “La Carretera”, se puede afirmar que Viggo Mortensen es uno de los actores más importantes y prestigiosos del momento. La actuación del pequeño Kodi Smit-McPhee también da que hablar. Sus expresiones sólo logran transmitirle al espectador el miedo por el que pasa su personaje, metiéndose íntegramente en su papel. La obra también cuenta con las actuaciones secundarias de grandes artistas como Robert Duvall, Guy Pearce y Molly Parker.
Pero si hay algo que resalta en este largometraje y merece varios aplausos es la magistral fotografía a cargo de Javier Aguirresarobe, donde plasma los tonos oscuros, grises y fríos en cada una de las tomas durante la película, permitiéndole al público sentir lo que realmente quieren expresar los actores y el director. Otro recurso que acompaña la fotografía es la música de Nick Cave, donde cada nota de piano transmite al espectador una dosis de melancolía que se complementa con el miedo por el que pasan el padre y su hijo en el film.
Sin embargo, el guión a cargo de Joe Penhall podría haber estado mejor. Se habla poco en la película y eso produce una distancia notoria entre el espectador y los actores,  causando que el público se quede mirando la historia desde afuera en vez de introducirse y formar parte de ella.
John Hillcoat  realizó un gran trabajo donde logró transportar una novela a la pantalla grande.  Los recursos justos y necesarios permitieron que el director se luzca en un film donde la nostalgia es el centro de la historia.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Entrevista con Carlos Nuñez Cortés

Detrás del telón
“Me da mucha pena sentirme como una ovejita
negra en el panorama humorístico argentino
Por Florencia García Martelli
Carlos Núñez Cortés, integrante del grupo humorístico y musical Les Luthiers. Comenzó estudiando química pero una vez recibido, decidió seguir por el camino de la música y del humor tan característico que viene haciendo con su grupo desde hace 42 años.


Eran las 20.40 y el hall del teatro Gran Rex se llenaba cada vez de más gente.

Pero lo importante estaba detrás de escena. Había un pasillo largo, con paredes mitad blancas y mitad verdes, las cuales llevaban a un  telón bordó ubicado del lado derecho al final del pasillo. Detrás de la enorme cortina había un hermoso diván rojo, y junto a él otra silla del mismo color. El piso estaba repleto de cables, y juntos a ellos deslumbrantes instrumentos bastante extraños y llamativos. Por un lado había un bajo sin clavijero, muchas pelotas de básquet que simulaban un órgano, tubos con luces que al tocarlos simulaban notas musicales, etc. Todo esto y más había en el detrás de escena de Les Luthiers.
Se empezó a escuchar la voz de uno de los integrantes del grupo: Carlos Núñez Cortés. “Vos debes ser Florencia, ¿No es cierto?”, fue lo primero que dijo. Luego de intercambiar un par de palabras, se dirigió a su camarín del teatro Gran Rex para comenzar ésta entrevista.

 Usted estudió química. ¿Ejerció en algún momento?
Ejercí durante un tiempo. Hice química biológica, me especialicé un poco en hormonas y trabajé en laboratorios de productos medicinales y en investigación, pero muy poquito tiempo, alrededor de 3 o 4 años, ya que simultáneamente Les Luthiers comenzaba a crecer de una manera casi exponencial

¿Y cuándo empezó su interés y hobbie por coleccionar caracoles marinos?
Yo aparte de lo que estoy haciendo con Les Luthiers, al igual que todos los seres humanos, tengo muchos hobbies, intereses y cosas que me apasionan. A mí se me dio por el lado de la naturaleza, me gusta mucho bucear. Allá por el año ‘76 hice un viaje por la costa de Brasil, empecé a bucear con un amigo y él encontró unos caracoles
especiales, muy bonitos. A partir de ese momento me empezaron a fascinar, y comencé a juntar a algunos, no a coleccionar.
Yo tengo una formación bastante naturalista, hice la carrera de química biológica y en ese momento no me quedé con el simple hecho de agarrar una cosa del mar, así que fui a averiguar quién era ese ser que había hecho esa cosita de carbonato de calcio, y de ahí empecé despacito, casi sin darme cuenta, a juntar caracoles desde el año ‘76. Ahora tengo una colección bastante considerable, más de cuatro mil caracoles. Todo esto me llevo a escribir, hace siete u ocho años, uno de los primeros libros que se editaron en argentina sobre malacología: “ Cien caracoles argentinos”. En realidad había uno de la doctora Castellano, una investigadora que escribió un libro muy completo, pero lo hizo hace muchos años por lo que era en blanco y negro, con dibujos y demás. Yo en cambio hice una primera guía de campo con fotografías, algo bastante más moderno.


También es muy aficionado a los juegos de palabras y acertijos, ¿No es cierto?
Si, escribí un libro que se llama Los juegos de Mastropiero. Es un análisis sobre la obra de Les Luthiers, en el que yo utilizo los mecanismos y los juegos de palabras que usamos, como por ejemplo: doble sentido, metátesis, palíndromos, anacronismos, calambures, aforismos, acrósticos, criptogramas, anacronismos, canambrunes, acrósticos, onomatopeyas, cristigramas, palíndromos,etc.  Describo todos los juegos del idioma que dan origen a los chistes.
A mi siempre me fascino la capacidad que tiene Les Luthiers de hacer reír a la gente sin el tortazo en la cara o mostrando el culito de las de turno o inventar cualquier cosa.
Nosotros jugamos muchos con las palabras, entonces me propuse hacer un análisis de los mecanismos de los chistes y juegos de palabras en las historias de Les Luthiers, y esto cristalizó en este libro que escribí ya hace unos 3 o 4 años atrás.

El humor fue cambiando bastante a lo largo del tiempo ¿Qué opina usted de eso?
No es que el humor haya cambiado, el humor siempre está. Hay gente que sigue utilizando recursos nobles  para hacer reír y hay gente que no, que se queda con otra cosa, con el tortazo o con el chiste chabacano, escatológico, sexista o machista. Nosotros por una razón o por otra nunca nos divertimos con ese humor, nunca nos llamó la atención. Lo nuestro fue por otro lado, nos gustó cultivar otro tipo de humor.
 Y a mi me da mucha pena sentirme como una ovejita negra, en el panorama humorístico argentino. Cuando sintonizo algún canal de televisión, como por ejemplo cuando veo Marcelo Tinelli, a mí la verdad me da vergüenza. Yo con eso no me río.

Y su tuviera que elegir a un humorista argentino, ¿Cuál sería?
Se murió pobrecito, Roberto Fontanarrosa. Realmente me encantaba.
 En cuanto a su familia, ¿Usted es casado? ¿Tiene hijos?
Sí, estoy casado y tengo dos hijos.

¿Y qué opinan ellos de su trabajo?
Lo disfrutan mucho, porque imagínate que lo mamaron desde chiquititos, ellos vinieron al teatro prácticamente desde que tienen uso de razón. El mayor es Leonardo que tiene
27 años y estudia Comunicación Social, y Natalí tiene 25 años y estudia Letras. Ambos están en cosas relacionadas, que tienen que ver con las palabras o la comunicación.

Con respecto a Les Luthiers ¿Cuándo empezó usted a construir instrumentos?
Desde toda la vida, desde el comienzo. Nosotros nacimos en  1977 como Les Luthiers y desde ese momento yo ya había empezado. Como en la facultad estudiaba química, el primer instrumento que hice fue con tubos de ensayo: el “tubófono  silicónico cromático”, lo hice con tubitos parcialmente rellenos de silicona, y  los soplaba como una flauta de pan. A partir de ahí construí junto a con el doctor Carlos Iraldi, que fue luthier de Les Luthiers,  muchos instrumentos, como 20 mas o menos.  

Y  si tuviera que elegir un instrumento con el que usted se quedaría, ¿Cuál sería?
Te pudo nombrar uno que nos costó mucho trabajo hacer, porque hubo que resolver centenares de desafíos tecnológicos. Ese instrumento fue el “órgano de campaña”, era un órgano como los de la iglesia, con tubos, teclados y demás, pero adaptado para ser usado en una banda militar. El tipo que lo tocara lo tenía que llevar en una mochila en su espalda y tenía que caminar con un artilugio que tenía en los zapatos que mandaba aire a un reservorio que llevaba en la espalda. ¡Un laburo terrible! Lo terminamos haciendo porque el sketch trataba de un coronel músico que había construido el órgano para ser ejecutado en  los desfiles.

Ya que habló sobre coroneles, Les Luthiers atravesó la época de la dictadura militar, ¿Les afectó a ustedes como grupo?
Como nos afecto a todos los argentinos. Pero nosotros no tuvimos nada que lamentar.

¿No hubo ningún tipo de censura?
 Hubo una autocensura propia. Nunca  vino alguien a decirnos algo. Nosotros tuvimos dos o tres chistes en esa época, como el del Ministro de Educación, el del Cabo Primero Anastacio López, y algún otro chistecito así,  por lo que tuvimos que cuidarnos un poco con lo que decíamos, pero sólo nos afecto por allí, ya que nos tuvimos que cuidar y autocensurar.

En algunas de sus entrevistas dijo que el General Jorge Rafael Videla era seguidor de Les Luthiers y que iba siempre a verlos. ¿Qué sentía cuando tenía que bajar del escenario a saludarlo?
Era como una obligación que teníamos que cumplir, ir, saludar correctamente y listo. Fíjate que los argentinos durante el Proceso estábamos bastante con los ojos tapados, las cosas que ahora se conocen tan bien con lujo de detalles, como los vuelos de la muerte, los centros de detención, las torturas o la chupa de gente en sí, en esa época no eran enteramente sabidas. Afuera se conocía más que en nuestro propio país. Nosotros vivíamos en una realidad irreal, entonces en el momento en que venía Videla, no sabíamos que él era el monstruo que luego demostró la justicia y la historia. Era algo con lo que nosotros preferíamos tener cierta distancia, pero nada más.

Comenzó a sonar su teléfono y se disculpó ya que tendría que atender sólo un momento. Cuando terminó su conversación de diez segundos, continuamos…

Volviendo al tema de las obras de Les Luthiers, ¿Cuál es su obra favorita entre todas las que tienen?
Les Luthiers tiene cerca de 150 obras, elegir una como favorita es complicado, hay muchas que a mí me gustan, así que tendría que hacerte una listado enorme. No tengo una obra favorita, hay muchas.

¿Y algún sketch que le quedó grabado o que disfrutó mucho al hacerlo?
Hay uno que me quedó especialmente grabado, que fue “La comisión”. Yo hacía de un maestro que se llamaba Manyacaprini y venían dos políticos a encargarme la modificación del Himno Nacional, ya que había un nuevo presidente y este quería que se lo nombrara en el himno. Yo era ese músico encargado de hacer esa modificación. Me encantó hacer ese papel, lo disfrute y me reí muchísimo.

¿Además de Les Luthiers tiene alguna actividad paralela?
Muchísimas. Coleccionar caracoles es una de ellas, pero montones de cosas más. Otra cosa que me gusta mucho es la observación de pájaros, cada vez que puedo salgo a mirarlos, a hacer “birdwatching”, como dicen los gringos.
También me gusta mucho trabajar con las palabras, me gustan muchos los acertijos matemáticos y colaboro de vez en cuando con alguna que otra revista.
Ahora estoy traduciendo en inglés un libro sobre “perros”, es un trabajo de un francés llamado Poncelet que le puso cabeza de perros a toda una serie de pinturas clásicas, es algo absolutamente maravilloso, y a alguien se le ocurrió inventar historias sobre cada uno de esos perros y yo las estoy traduciendo, pero por el simple hecho de que tengo ganas de hacerlo. Hago muchas, pero muchas cosas además de Les Luthiers.

¿Tienen algo planeado para después de Lutherapia?
Estamos pensando para el año que viene en lanzar una antología. No va a haber un espectáculo original e inédito, sino que va a ser un popurrí de los mejores momentos de nuestra historia, así que estamos trabajando en eso.

¿Piensa escribir algún otro libro?
Por el momento no; no se me ocurre ninguno. Estuve pensando hace poco en hacer un libro parecido al anterior, “Los juegos de Mastropiero”, así como ese tiene que ver con los juegos de palabras, me gustaría hacer un análisis musicológico sobre las parodias musicales de Les Luthiers. Hay un material riquísimo y muy grande sobre eso, pero creo que me queda grande el proyecto, para eso hay que haber estudiado muchísima música, yo estudié bastante pero tal vez no lo suficiente.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Película: El Baile de la Victoria.

El baile poco victorioso de Trueba
Por Florencia García Martelli
El cineasta español, Fernando Trueba, vuelve al cine luego de su ausencia por seis años. Pero ¿su vuelta valió la pena? El conocido director volvió de la mano de El baile de la Victoria, una película basada en  la novela de Antonio Skármeta. La historia se basa en Chile, donde con la llegada de la democracia el presidente chileno decreta una amnistía general para todos los presos sin delitos de sangre. Ángel Santiago (Abel Ayala) sale en libertad de la cárcel y se encuentra con la joven Victoria (Miranda Bodenhöfer), una chica huérfana y bailarina, de quien se enamora. Al mismo tiempo,  Ángel planea un gran robo junto a Nicolás Vergara Grey (Ricardo Darín), un famoso ladrón de cajas fuertes, que fue liberado el mismo día que él de la penitenciaria. Sin embargo, el principal objetivo de Nicolás al salir de la cárcel no es volver a cometer delitos, sino recuperar a su esposa y su hijo.
La película se torna pesada. No se sabe bien si se trata sobre la vida de Nicolás o sobre la historia del jovencito Ángel , perdidamente enamorado de Victoria, donde su sobre actuación logra fastidiar al espectador.
Por supuesto la actuación de Ricardo Darín es excelente, pero lamentablemente queda en un recuerdo, ya que su papel pasa a un lugar secundario. La gran revelación aquí es Victoria (Miranda Bodenhöfer). Una joven que perdió su voz luego de que asesinaran a sus padres durante la dictadura de Pinochet, y que logra expresarse a través de la danza. Una actuación impecable, muy creíble. Definitivamente  lo único verosímil de toda la película.
En la película falla uno de los elementos más importante: el guión. Un libreto que fue firmado por Trueba, su hijo Jonas y el propio autor de la novela Antonio Skármeta. Un guión que no logra expresar mucho y que le falta profesionalismo, sobre todo en la mitad en adelante del film, dónde Darín deja sorpresivamente de luchar por recuperar a su esposa y su hijo, los cuales quedan en el recuerdo de esta historia.  
Lo que si se logra destacar de la película es la fotografía a cargo de Julián Ledesma. Un trabajo impecable, genial.
El baile de la Victoria iba a ser candidata a los premios Òscar para la mejor película de habla no inglesa, pero finalmente no fue seleccionada. Una verdadera lástima, ya que era una película que tenía muchas cosas a favor para que resulte interesante, pero el director  no lo supo aprovechar.

Acostumbrarse a un nuevo mundo




Por Florencia García Martelli
Martín Hallin se vino a vivir hace dos años a Buenos Aires para estar junto a su esposa, María, y así comenzar una nueva vida juntos. Una vez instalado, la pareja comenzó su propio proyecto: un restaurant de comida vegetariana ubicado en el barrio de Monserrat, en pleno corazón porteño. Una entrevista donde su particular historia de amor toma el protagonismo.


Pelo rubio, tez clara, mejillas coloradas y ojos celestes, casi tan transparentes como el mar. Al escucharlo hablar, su acento delata que proviene de otro continente, del europeo. Martín Hallin es un joven de 26 años que nació Suecia, país que dejo para comenzar una nueva vida en la Argentina. Pero, ¿cuál fue la razón para que él esté viviendo actualmente en el país? La respuesta es María, su actual esposa.
Todo comenzó en el  2006 cuando Martín y María se conocieron en Uruguay.  Él estaba de vacaciones y ella había dejado Buenos Aires con la intención de pasar un lindo verano. Ambos staban alojados en el mismo hotel de Uruguay, por lo que compartieron varias excursiones. Luego de verse todos los días, junto a las demás personas que compartían esas travesías, comenzaron a hablar. Cuando las vacaciones finalizaron, dos meses después, cada uno volvió a su país. Pero Martín tenía muy en claro que María no era una chica más en su vida.
Un tiempo después, luego de una relación a la distancia, María viajó a Suecia y se instaló allá junto a él. En el 2008, mientras estaban en el continente europeo, Martín le propuso casamiento. "No lo teníamos tan planeado, pero ella había ido para Suecia, y fue como un impulso más que nada. Fue el mejor impulso que pude haber tenido" , cuenta el sueco.
Una vez instalado en Buenos Aires junto a su esposa, decidieron comenzar un nuevo proyecto: un restaurant vegetariano. "Ni bien llegué, empezamos a trabajar en el restaurant,  ya hace casi dos años. Fue algo que se nos ocurrió en Suecia, y la verdad nunca pensé que iba a quedar tal como lo pensamos. Nos dedicamos solamente a comidas vegetarías , sin químicos ni nada parecido, bien natural", comenta Martín, mientras María trae a la mesa dos jugos orgánicos: uno de pomelo y otro de limón.
Sin embargo, a pesar de estar muy feliz en Argentina, el joven afirma que realmente anhela algo de Suecia: "Yo soy del norte de mi país, de la ciudad de Kiruna, y lo que más extrañó son los bosques y el paisaje".
Con tan sólo un año y diez meses viviendo en Capital Federal, maneja de forma excelente el castellano. María le enseñó todo lo posible sobre el idioma, al igual que sus amigos, con los que aprendió mucho hablando. "Nunca  sufrí ningún tipo de discriminación, sólo se reían un  poco cuando hablaba mal, porque es difícil. Todos me trataron muy bien a pesar de ser de otro país", comenta entre risas.

A la hora de encontrar algo en común entre Suecia y Argentina, Martín destaca  la similitud entre las personas de ambos países: "Son buena gente, pero a la vez un poco encerradas en sí mismas y melancólicas".
Con una gran sonrisa, Martín asegura no estar arrepentido de haberse venido a vivir a la Argentina. "Tal vez tuve que dejar varias cosas en Suecia, como mis amigos, mi gente y el lugar en general sobre todo, pero María hace que todo eso valga la pena.", confiesa mientras le sonríe a su esposa. Por el momento, ambos tienen pensado seguir viviendo en el país, pero en cuanto  a la hora de ser padre, Martín opina que le gustaría tener a sus hijos en una isla que esté ubicada en el Océano Atlántico: "En el medio de Suecia y de Argentina, si es posible, así tiene cosas de allá y de acá",
El joven Hallin se define como “un argentino más”, y según él lo que más le gusta de las tradiciones argentinas es la comida. "Me encanta que a todos les guste el asado, así yo tengo que convencerlos de empezar a comer más verduras ", cuenta mientras sonríe.
Contento y conforme con los rotundos cambios en su vida, Martín vive el presente y disfruta de su vida diaria porteña junto al amor de su vida.